La industria del acero pide que el mercado de CO2 no la penalice.
El presidente del Principado, Adrián Barbón, expresó ayer la “produnda preocupación y decepción” del Gobierno asturiano tras la decisión de la Unión Europea (UE) de no reforzar las medidas de protección del acero comunitario frente a los importadores. Barbón transmitió su alarma sobre el futuro de la siderurgia al jefe del Ejecutivo central, Pedro Sánchez, al que pidió que promueva una “respuesta contundente” para que Bruselas reconsidere esa política.
“No puede ser que estemos compitiendo en desigualdad de condiciones. Defendí y defiendo el arancel ambiental, pero hay otras medidas de ajuste que la UE no está adoptando”, afirmó Barbón, refiriéndose tanto al establecimiento de una barrera comercial relacionada con las emisiones de CO2 (arancel ambiental europeo, pendiente aún de diseño) como a la reducción de las cuotas de entrada de acero extracomunitario que la industria pedía restringir drásticamente, medida avalada por varios gobiernos, entre ellos el español, pero rechazada por una mayoría de veinte estados.
La negativa de la UE a elevar la protección comercial del acero pese al hundimiento de la demanda por la crisis del covid-19 ha amplificado las alarmas en el sector continental. La confederación sindical IndustriALL-Europa, de la que es vicesecretario el asturiano Luis Ángel Colunga, está demandando medidas comerciales, fiscales, ambientales, financieras y de estímulo de la demanda para rescatar a la siderurgia. La organización que representa a los siderúrgicos europeos teme que, tras la crisis actual, desaparezca la mitad de la capacidad productiva del sector, cuya producción se ha reducido el 40%.
Los usuarios de acero critican las demandas de salvaguardia de Eurofer
Las principales acerías europeas están llevando a cabo una “campaña egocéntrica y engañosa destinada a sellar virtualmente completamente el mercado del acero en Europa”, dijo la asociación europea de procesamiento de alambrón no integrado (EUNIRPA).
Antes de la votación del viernes pasado (12 de junio) de los representantes de los estados miembros de la UE en un comité de salvaguardia, EUNIRPA criticó las “medidas proteccionistas extravagantemente” propuestas por Eurofer en respuesta a la pandemia de Covid-19. Las propuestas de Eurofer no tienen otro propósito que proteger “sin rodeos” al mercado europeo de las importaciones ajustando las cuotas de salvaguardia de manera que sean “incompatibles con los principios básicos de la UE y la OMC”, dijo EUNIRPA.
Los directores ejecutivos de las principales fábricas europeas a principios de esta semana enviaron una carta a la comisión llamando a la propuesta de salvaguardia de la comisión “inútil”, ya que no tuvo en cuenta una caída de la demanda del 50% desde la pandemia a mediados de marzo.
La comisión parece no estar dispuesta a aceptar una reducción de cuota “drástica” temporal para hacer frente al colapso repentino de la demanda debido al coronavirus. También inaceptable para la comisión sería frenar aún más la liberalización de las importaciones al reducir el ritmo del aumento progresivo de las cuotas de importación a 1 por ciento de 3 por ciento.
La venta de vehículos ligeros en México durante el mes de mayo fue de 42 mil 28 unidades, lo que representó una disminución del 58.96% en comparación con mayo de 2019 cuando se vendieron 102,402 unidades, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El resultado significó la caída de ventas más pronunciada desde 1998, la cual se explicó por el aislamiento social motivado por la contingencia sanitaria ante la pandemia de COVID-19 que obligó a las distribuidoras de automotores a cerrar sus pisos de venta.
Esta circunstancia motivó a que sólo se pudieran comercializar vehículos a través de la combinación de canales de venta a distancia (atención telefónica, redes sociales, sitios web) y atención domiciliaria.
En el acumulado enero a mayo se comercializaron 373 mil 608 vehículos, mientras que en el mismo periodo del año anterior se colocaron 533 mil 748 unidades, lo que representó una disminución del 30%.
La Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) explicó que desde el inicio del aislamiento social por COVID-19, se han modificado rápidamente los hábitos de consumo de la población y la capacidad de gestión de los distribuidores, adaptándose al entorno y utilizando de mejor forma estos canales.
“Esta circunstancia explica en buena medida que la venta en mayo haya sido mejor que en abril y con una caída relativa menor que la del mes anterior”, recalcó.
En abril se colocaron 34,903 unidades, lo que representó una caída de 64.5% en comparación con el mismo mes del año anterior.
En el orden de variables positivas también contribuyó el registro de venta de flotillas, incluyendo ventas internas entre personal de las propias empresas automotrices.
“No obstante que la comercialización de vehículos ligeros en mayo fue mejor a lo estimado, la fuerte disminución observada, 58.96% en el mes y 30% a lo largo del año, se suma a los resultados negativos registrados en el mercado mexicano desde junio de 2017, con lo que se ligaron 36 meses con resultados desfavorables”, recalcó la AMDA.
Advirtió que la situación del sector es delicada, ya que la continuidad del cierre de los pisos de venta de las distribuidoras en la mayor parte del país, incluyendo las entidades federativas de mayor venta de vehículos (Ciudad de México, Estado de México y Nuevo León) seguirá impactando negativamente la comercialización de vehículos.
Por esta razón, “los distribuidores de automotores mantienen su solicitud al gobierno federal para ser incluidos como parte de la cadena productiva de la industria automotriz y que la comercialización de vehículos sea considerada actividad esencial para poder abrir los establecimientos”.
“La comercialización de vehículos es una fuente relevante de captación de impuestos, generación de empleo y derrama económica que a través de más de 3 mil establecimientos contribuye de forma importante a la economía nacional”, subrayó.
Los automóviles Volkswagen Tiguan se muestran en una línea de producción en la planta de ensamblaje de la compañía en Puebla, México.
La industria de autopartes en México advirtió el viernes una paralización en las cadenas de producción en Estados Unidos, si el gobierno del central estado Puebla les impide reabrir a partir del 1 de junio algunas plantas que cerraron por la crisis del coronavirus.
El gobierno poblano impidió recientemente la reapertura del sector automotor, pese a tener luz verde del gobierno federal por ser considerado esencial, y esta semana dijo que podrá reactivarse desde el 15 de junio, cuando se regirán por un sistema de semáforo que inicia el lunes en el resto del país.
Puebla alberga automotrices como Volkswagen y Audi y fabricantes de partes como Rassini, Thyssenkrupp y Benteler.
La Industria Nacional de Autopartes (INA) dijo que ahí se ubica “gran parte” de las empresas que proveen a la cadena de América del Norte, donde aseguran no puede fabricarse un vehículo sin piezas mexicanas.
“Vemos muy serio y grave que no se permita reabrir a partir de 1 junio puesto que la consecuencia va a ser el paro de las cadenas de producción en Estados Unidos”, dijo Alberto Bustamante, director de comercio exterior de la INA, a Reuters.
Para evitar disrupciones en las cadenas de valor, la INA propuso al gobernador poblano Miguel Barbosa autorizar el arranque inmediato de un listado de empresas que no quiso detallar y cuyas plantillas representan un 11% de los cerca de 97,000 empleados automotrices manufactureros del estado.
“Pudiésemos arrancar con entre 30% y 50% (de la nómina) en cada una de esas empresas (…) 11% es un número muy considerable para no poner en riesgo a la población en Puebla y con eso garantizar el abastecimiento”, explicó Bustamante.
La entidad contabiliza 2,662 casos positivos por COVID-19 de los 81,400 casos conocidos hasta el jueves en todo el país, así como 335 muertos de un acumulado nacional que ya superó los 9,000, según datos de la Secretaría de Salud.
Previamente, diversas asociaciones automotrices le habían solicitado de forma conjunta al mandatario estatal que les permitiera iniciar “lo antes posible” la reactivación de sus plantas en la entidad, luego de que Barbosa se opuso a la reapertura a través de un decreto.
Tras ser catalogada como esencial en mayo junto con la minería y la construcción, la industria automotriz -altamente conectada con las cadenas de valor de Estados Unidos- ha ido retomando en los últimos días su operación de forma gradual con estrictos protocolos sanitarios en el territorio mexicano.
El mayor productor de acero de Taiwán, China Steel Corp (CSC, 中 鋼), informó que aumentaría los precios en un 1,87 por ciento mensual para las entregas en julio, lo que refleja la recuperación del sentimiento del mercado, según informò el diario Taipei Times.
Después de reducir los precios durante dos meses consecutivos debido a la caída de los mercados mundiales en medio de la pandemia de COVID-19, China Steel dijo que aumentaría los precios para igualar a la industria internacional, citando aumentos de precios por parte de los fabricantes de acero estadounidenses y chinos.
La compañía aumentará los precios de las placas de acero laminadas en caliente y las bobinas de acero laminadas en caliente, así como las tuberías de acero laminadas en caliente y laminadas en frío, en NT $ 450 (US $ 15) por tonelada.
El precio de las bobinas de acero galvanizado en caliente también está sujeto a un aumento de NT $ 450, mientras que el precio de las láminas electromagnéticas se mantendrá sin cambios, dijo China Steel.
Buscando mejorar su esquema de precios para reflejar mejor las fluctuaciones del mercado, China Steel dijo que cambiaría su calendario de precios.
En lugar de anunciar los precios de entrega con dos meses de anticipación, la compañía dijo que planea publicar planes de precios un mes antes de los envíos, lo que le da más margen de maniobra para adaptarse a las cambiantes condiciones económicas.
China Steel lanzó sus planes de precios mensuales junto con planes de precios trimestrales este año para que los precios puedan igualar más rápidamente la demanda del mercado.
Los dos planes de precios implican listas separadas de productos utilizados en diferentes industrias.
Debido al período más largo entre los anuncios de precios trimestrales y las entregas finales, China Steel dijo que recortaría los precios de los envíos nacionales que vencen el próximo trimestre para ayudar a las industrias intermedias a superar las dificultades derivadas de la pandemia.
En México se registraron cambios incluso antes de que arribase la pandemia de Coronavirus, Covid-19, y eso se aprecia en la llegada de nuevos participantes al mercado del acero en los últimos 10 años, así como en un acortamiento en las distancias tanto en comunicación como en logística, consideró Alfonso Figueroa, Director Comercial de Duferco México, al participar en la conferencia virtual “Mexico Steel, Metals and Mining”, organizado por MM Steel Club.
Otros cambios que se experimentaron en México previamente, dijo, fueron un abaratamiento del dinero, mayor inversión local en cantidad y calidad en “Big Business”, así como una diversificación del mercado. Pero con la llegada del coronavirus, dijo, se creo incertidumbre, con lo que se contrajo la demanda en un 50%, las importaciones cayeron 80%, el tipo de cambio se hizo volátil (paso de $18 hasta $25 peso por dólar), se suspendieron las inversiones en infraestructura, la liquidez se volvió muy limitada, y la incertidumbre aumentó. Con ello, explicó, hubo cambios en la comercialización de acero, ahora con financiamientos más largos, negocios DDP (Servicio entregado pagado), especialización de la producción, apoyo técnico, aumento de la sinergia entre las cadenas de producción y suministros, y una oportunidad de fusiones y adquisiciones. Como conclusión Figueroa instó a permitir que nos venza el pánico por la situación de crisis, sino a entender que son una oportunidad para el cambio. Por su parte Federico Forastieri, CEO de Swebor LatAm, consideró que la actual pandemia de Covid-19 es una tragedia para el mundo y para México, y señaló que aunque en nuestro país inició en marzo, la implementación de protocolos sanitarios y en general la actuación del gobierno ha sido débil. Añadió que México se ubica en muy mala posición global en cuanto a contagios y letalidad, y más grave aún, no sabemos qué ocurrirá en los siguientes tres meses. Señaló que aunque espera lo mejor, la actual crisis aceleró una mala situación que ya existía desde el año pasado.
“Hoy los expertos prevén una caída del PIB de entre 7 a 9% acompañada de un deterioro en el nivel de empleo, pues falta apoyo en ese sentido, lo que elevará en 10 millones la población bajo la línea de pobreza en México”. Resaltó que este deterioro generalizado hace prever que haya un incremento en los problemas de delincuencia, por lo que señaló que se requiere de una mejora en seguridad.
Con respecto a la forma de trabajar señaló que continuará con los protocolos de seguridad sanitaria, y con el denominado Home Office, y añadió que es menester apoyar a la gente. Luis Rodríguez, ex President de Automotive Cuprum y actual ejecutivo MIT de Sloan School of Management, señaló que en la actual crisis por el Covid-19 es necesario brindar seguridad al empleo, controlar el flujo de caja y el gasto en capital (inversión), e identificar cualquier rezago o bache en cuanto al empleo y en el mercado.
Consideró que es preciso que la industria eleve su nivel de comunicación, y aprenda a adaptarse a las nuevas y cambiantes circunstancias, así como a la denominada “nueva normalidad”. Consideró que la situación actual exige que haya una consolidación del modelo de negocio y su portafolio y que haya también un desarrollo de nuevos modelos de negocios.
Añadió que es necesario que hoy se capture la experiencia y aprendizaje de la situación que se ha vivido, se aproveche el momento para lanzar nuevos modelos de negocio, y en la medida de lo posible se concreten fusiones y adquisiciones. Concluyó señalando la importancia de la adaptación para enfrentar los cambios, y añadió que este es el momento de remodelar lo que sea necesario, y de lanzar nuevos proyectos.
Fuente: Reportacero
Más información de la conferencia en: https://bit.ly/2AqhEZx
Toda la producción automotriz y de autopartes se debe adecuar a las nuevas condiciones, en especial protegiendo al trabajador en sus operaciones y también a sus familias, consideró Flavio Rivera, presidente y CEO de Daimler México al participar en el panel «Mexico’s Auto Industry During Covid-19 & USMCA Times».
Consideró que en el corto y mediano plazo hay un gran reto para satisfacer las demandas del mercado interno, en especial si se considera que la transportación es totalmente necesaria, para lo que se requieren vehículos, autobuses y camiones.
A lo anterior Bruno Cattori, Presidente y CEO de FCA, añadió que se necesita reganar el consumo, la demanda interna, tras la pandemia, y esforzarse en implementar los nuevos protocoles de seguridad sanitaria para reiniciar lal operaciones de producción.
Destacó también la importancia de proteger al trabajador, de brindarle todas las herramientas de seguridad convencionales y las que exigen los protocoles de seguridad de la pandemia.
Héctor Pérez, Presidente y CEO de Ford Motor Company, dijo que actualmente están trabajando a distancia y preparándose para implementar nuevos planes, en la nueva normalidad, que incluyen el lanzamiento de un nuevo vehículo eléctrico.
Consideró que la actual crisis brinda nuevas oportunidades de trabajo en México, como es el comercio electrónico, y señaló que en México hay un gran mercado de hay que capitalizar.
Por su parte Horacio Chávez, director General de Kia Motors México, reiteró la importancia que tiene para las armadoras en general y en especial para ellos, la protección del trabajador, la cual consideró una prioridad en el corto y mediano plazo.
Añadió que producir y exportar es también un nuevo reto ante el que hay que reaccionar de acuerdo a los nuevos escenarios, en especial en la planta de Nuevo León, la cual es altamente exportadora.
Destacó la importancia de mantener el mercado identificar los nuevos desafíos para poder atacarlos.
Señaló que hoy todo lo que se puede atender en línea con los consumidores se está llevando a cabo. “Hoy hay muchas oportunidades nuevas”, consideró
Bernardo Valenzuela, Director General de Navistar México, señaló que en la nueva normalidad lo más importante, tras la pandemia, es estar preparado.
El gran reto que se enfrenta, dijo, es restaurar la economía, resguardar al trabajador y atender al consumidor, además de que es necesario mantener un alto nivel de diálogo con las autoridades.
Chávez consideró que los grandes retos traen consigo también grandes oportunidades y añadió que luego de cinco años en México ofrecen más autopartes y atienden la demanda local.
Cuestionado respecto a la calidad que se ofrece en México en el mercado automotriz señaló que Kia es la marca posicionada como la número 1 en Estados Unidos en materia de calidad, y eso es muy importantes porque dedican el 60% de su producción al mercado Norteamericano, lo que representa también una oportunidad para los siguientes años.
Con relación al éxito pasado del Tratado de Libre Comercio de Norte America, TLCAN, Valenzuela que luego de más de 20 años se creó un gran sector automotriz en México, dedicado a la exportación, en los que Navistar ha estado construyendo y autopartes.
Con respecto a la calidad de los productos mexicanos señaló que son competitivos, y esa es la razón de que se envían no sólo a Norteamérica, sino a otras latitudes.
Flavio Rivera aprovechó para señalar la necesidad de crear una gran cadena de suministro para poder ofrecer productos de la más alta calidad a México y el Mundo.
Cattori indicó que en los últimos 20 años en México se ha sido muy extremo en cumplir los estándares para surtir a los mercados internacionales.
Con relación a la actual importancia de que se trabaje junto a la academia, el gobierno, los proveedores y el gobierno, Chávez indicó que esto es necesario no sólo para el país, sino considerando el conjunto Norteamérica.
Destacó la importancia de trabajar de la mano con la academia, para que prepare a las personas que fabrican los automóviles, tanto en el nivel técnico, como a nivel profesional.
Pérez también consideró de mayor importancia trabajar de la mano con la academia para poder alcanzar los mayores estándares, y añadió que se necesita el talento y las habilidades del trabajador automotriz.
Consideró también de importancia el trabajar junto con el gobierno, en especial en este momento de arranque.
La Oficina Federal de Estadística de Alemania (Destatis) anunció hoy que la economía del país europeo sufre su peor contracción desde la crisis económica del 2008, y superior a la que vivió en la reunificación en 1990.
Los datos registran una contracción del 2.2 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), en el primer trimestre del año en relación al último cuarto de 2019, confirmando la estimación a la baja de mediados de mayo.
La caída del PIB en el primer trimestre de 2020 obedece principalmente al retroceso del consumo de los hogares de 3.2 por ciento en relación al último del año pasado, mientras que los gastos del Estado se mantuvieron estables en 0.2 por ciento, informó la Deutsche Welle (DW).
Los gastos en bienes de equipo cayeron 6.9 por ciento en un mes, en un contexto de crisis industrial en Alemania, cuya actividad se desaceleró significativamente por la pandemia según estimaciones de Destatis.
Las exportaciones cayeron 3.1 por ciento en un trimestre, mientras que las importaciones registraron caída del 1.6 por ciento, y solo el sector de la construcción registra alza de inversiones, de 4.1 por ciento, lo que impidió que la caída del PIB fuera mayor, agregó la oficina de estadística.
Debido a que las medidas de confinamiento para frenar la pandemia empezaron a mediados de marzo, se espera que su impacto sea mucho mayor aún en el segundo trimestre, que va de abril a junio.
El gobierno alemán espera para este 2020 la peor recesión desde el término de la Segunda Guerra Mundial, con estimación de que el PIB se reduzca 6.3 por ciento.
¿Qué tan preparado está México para salir a reactivar la economía?
El 13 de mayo, las autoridades sanitarias de México divulgaron su plan para reabrir el país tras la cuarentena implementada para enfrentar la pandemia de COVID-19.
Aunque la estrategia no daría inicio hasta el 1 de junio, la secretaria de Economía, Graciela Márquez, informó que desde el 18 de mayo se comenzará con la reapertura de 269 municipios, ubicados en 15 estados, en los cuales no se ha registrado casos del nuevo coronavirus ni colindan con regiones afectadas por el SARS-CoV-2.
Entre tanto, del 18 de mayo al 1 de junio el resto de los municipios del país deberán proponer estrategias para reabrir sus actividades. Sin embargo, en la misma fecha las industrias de la construcción, minería y autopartes ya podrán volver a funcionar.
Hasta este punto, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha advertido que el resto de las actividades regresará de forma espaciada y paulatina. Expertos consultados por Sputnik concordaron en que esta acotación es clave para entender el anuncio dado por las autoridades, particularmente tras coincidir con el pico máximo de contagios de la COVID-19 en México.
«No hay que confundir hacer planes con ejecutarlos. Lo que se está proponiendo es empezar a hacer los planes de cómo va a ser el regreso para que pueda ser lo más ordenado posible. Y eso va a llevar tiempo, por eso había que empezar cuanto antes a hacerlo.
«No hay que confundir que nos hayan dicho que nos pusiéramos a hacer planes a que creamos que eso ya significa el regreso. No es el caso», comentó Mauricio Rodríguez Álvarez, profesor de la Facultad de Medicina y Vocero de la Comisión para COVID-19 de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Para Rodríguez Álvarez, la estrategia del gobierno alerta sobre la necesidad de clarificar las acciones y la preparación que se requiere para reactivar al país tras el distanciamiento social. Desde su perspectiva, todos los regresos, tanto de actividades esenciales como no esenciales, requieren de una evaluación de riesgos previa para anticipar cualquier dificultad.
Por su parte, Alejandro Macías, infectólogo y excomisionado nacional para la prevención y control de la influenza, advirtió que, si bien se ha dicho que el regreso a la normalidad será un proceso progresivo, aún es prematuro adelantar fechas.
«No me parece adecuado poner una agenda en el momento en que apenas estamos de subida en la pandemia en México. Creo que no se va a poder adaptar necesariamente a las fechas que están dando.
Todavía nos puede faltar un poco o mucho más que eso. No se puede decir que ya estemos estables hasta que no hayan pasado unos 14 días en los que veamos que no están aumentando las cifras para poder decir que nos falta media pandemia», explicó.
Mauricio Rodríguez Álvarez agregó a esta perspectiva la importancia de que la sociedad ponga de su parte para conseguir que las estrategias delineadas en los próximos días tengan éxito.
Recordó que, tras el anuncio del regreso a las actividades, Hugo López-Gatell, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, destacó que varias personas volvieron a la vía pública pese a las advertencias de las autoridades.
«Puede ser que el gobierno tenga el plan, pero si la gente no ayuda o no lo ejecuta bien podría haber problemas. Lo que queda claro de esta primera propuesta es que va a ser un asunto de todos, todos tienen algo que participar. Ahorita estamos con muchos casos que pueden provocar muchos contagios. No hay que relajar ahora las medidas», consideró.
Evaluar la circunstancia de cada ciudad
A su vez, Alejandro Macías resaltó el papel que deberán jugar de aquí en adelante las autoridades estatales y municipales en la planeación de los regresos. Del mismo modo, dudó que las propuestas del gobierno federal puedan implementarse tal como se presentó en la conferencia de prensa del 13 de mayo.
«Los gobernadores y presidentes van a tener que tomar muchas decisiones que puedan parecer opuestas a las que está indicando la federación. Como la federación está indicando que todo esto es voluntario, me parece evidente que va a ser como un catálogo de buena voluntad, pero que, al final, muchas de las acciones se van a concretar o alistar a nivel local y regional», anticipó.
En este sentido, el excomisionado nacional para la prevención y control de la influenza señaló que será importante evaluar las circunstancias de las distintas ciudades del país, ya que en muchos casos se piensa que las tendencias de contagio son similares a las vistas en Ciudad de México. Por ese factor, enfatizó que no deberían anticiparse las fechas para reanudar las actividades normales del país.
«Probablemente ya estemos entrando a una etapa de estabilización en Ciudad de México, pero muchas ciudades del interior apenas están por entrar. Lo que percibo es que están incrementándose los casos y vamos desfasados de los casos que existen en la capital», señaló Macías.
De modo similar, Mauricio Rodríguez Álvarez recalcó que aún no se han establecido fechas para reanudar labores en los sitios más afectados por la pandemia de COVID-19. En todo caso, llamó la atención sobre el hecho de que, a partir del 18 de mayo «todos vamos a ponernos a ver qué actividades tenemos, cuál es el riesgo, dónde están los riesgos mayores y menores, cómo le vamos a hacer».
«Esto es parte de la preparación de la respuesta y eso le va a dar la oportunidad a todos los actores para poder identificar qué necesitan en sus fábricas, negocios, escuelas, centros, para poder ir planeando un regreso. Para abrir en una epidemia lo fácil era mandarnos a la casa, lo difícil es sacarnos», afirmó.
El lunes 18 de mayo México reportó 2.414 nuevos casos de coronavirus y con ello rebasó la barrera de los 50.000 contagiados. Según comentó el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, es «el momento de máxima transmisión».
Sao Paulo. En medio de la crisis económica global y regional más profunda de la historia, la industria latinoamericana del acero ha estado registrando sus efectos negativos. En diversos países, las empresas tuvieron que reducir su producción o detener las operaciones mientras que otras industrias se adaptaban a una nueva realidad.
En México el PIB se contrajo un 2,4% en el primer trimestre en comparación con el mismo período del año pasado, la mayor caída desde el tercer trimestre de 2009. Gran parte de esta disminución se debe a la caída del 3,8% en actividades industriales y de construcción, además del desempeño de la industria automotriz. La producción automotriz mexicana experimentó una caída de su producción de un 8,5% en comparación con el mismo trimestre de 2019, así como sus exportaciones (-7%).
La actividad industrial brasileña cayó un 9,1% en marzo, en comparación con febrero, mostrando un fuerte impacto de la pandemia y las medidas de aislamiento social en el sector y en la actividad económica. La caída del 2,6% en el primer trimestre de 2020, en comparación con los tres meses anteriores, fue la mayor reducción desde el segundo trimestre de 2018.
En Argentina, en marzo la actividad manufacturera se contrajo 0,9% con relación al mes de febrero, y se derrumbó 6,4% respecto del mismo mes del año pasado. Las producciones automotriz y de cemento se paralizaron. En febrero, el consumo aparente de la región experimentó una reducción del 2,5% en comparación con el mismo mes del año pasado, además de una caída acumulada del 2%. Con relación a enero, la disminución fue del 7%. Argentina y México se encuentran entre los países más afectados.
Con esto la proyección para el consumo aparente de acero hasta ahora es una disminución del 13,8%, cerca de 8 millones de toneladas menos, alcanzando un total de 55,4 millones de toneladas, de acuerdo con la información recibida de cada país hasta ahora.
“En paralelo a este escenario, se ve una rápida recuperación de la industria de acero de China y el riesgo continuo de su exceso de capacidad para la región. Ante la pronunciada caída de los mercados mundiales, continuará buscando exportar su producción a Latinoamérica, lo que podría dificultar aún más la recuperación de la región”, dijo Francisco Leal, director general de la Asociación Latinoamericana del Acero (Alacero).
Un aumento inesperado del 3,5% en las exportaciones de China y la caída del 14,2% en las importaciones en abril en comparación con el mismo mes del año anterior contribuyeron a un superávit comercial global de US$45.340 millones, muy por encima de los EE.UU., con sus US$19.900 millones registrados en marzo.
Producción y exportaciones a la baja. La producción de acero crudo cayó un 8% en el primer trimestre, mientras que los productos laminados disminuyeron un 3% en el período. Los efectos más serios de la pandemia comenzaron a verse en Argentina en marzo con una reducción del 27% en comparación con el mismo mes del año pasado. La caída en marzo corresponde a un tercio del mes, debido a la cuarentena desde el 20 de marzo. Las exportaciones, por su parte, continúan reflejando la debilidad de la demanda mundial de acero: cayeron un 15% en los primeros dos meses del año. Alacero destaca que la industria del acero está colaborando activamente en apoyar el fortalecimiento de los sistemas de salud de la región mediante la construcción de nuevos centros de tratamiento para el Covid-19, la expansión de hospitales comunitarios y con fondos extraordinarios para apoyar a las comunidades.
“La colaboración de la industria del acero es fundamental para una gran cantidad de cadenas de valor que son vitales para la sociedad en este momento, como son, desde el suministro de oxígeno, el transporte y la infraestructura, hasta el almacenamiento de alimentos, productos desinfectantes, electrodomésticos y muchos otros más, esenciales para enfrentar la crisis y lograr una reactivación de la economía de forma más rápida”, expresó el gremio.